lunes, 18 de febrero de 2013

No te vayas Benedicto

Este mundo se ríe de nosotros. Un país entero pidiendo la dimisión de una persona y el que dimite es otro. Justamente el último que cabría esperar. Quien tiene que hacerlo no lo hace y el que no debe, ni debería poder, lo hace. Yo ya no entiendo nada.
Vale que es un filón  para los amantes del misterio, pero creo que nadie (excepto ellos) se va a alegrar, al menos en este país, de la renuncia del Papa de Roma. Y no porque nos caiga simpático o deje de hacerlo el Cardenal Ratzinger, sino porque tenemos dimisiones más importantes en las que pensar. A bote pronto se me ocurren dos de alto calado, pero podría hacer una lista mucho más extensa.
Incluso, para algunos como yo, me parece incluso mal. ¿Cómo coño se va a jubilar un Papa? ¿Ya no queda nada sagrado o que pasa en este mundo? Y soy ateo (incluso comprendiendo que el ateísmo radical es tan irracional como la creencia), pero no me gusta que me tomen el pelo.
Si el Papa esta ahí chupando del bote, por lo menos que se comporte como tal. Que apechugue con lo que le toca. Y ser Papa es como ser tonto, se es hasta que te mueres. Para algo Dios te puso ahí. ¿O no?
Best Papa Forever. Fuente:Blogcatalog.com
Y no me valen excusas de que está cansado o que ya no puede hacer bien su trabajo. ¡SER PAPA NO ES UN TRABAJO! Es un atributo. Es como ser alto o bajo, se es y punto. No se puede renunciar. Total para lo que hace...
Porque, a ver si me entero, se supone que para ser Papa, o Rey, hace falta ser alguien especial ¿no? Ser alguien divino, cuasi mágico, supranatural. Si es así, ¿cómo va alguien tan poderoso a "jubilarse" por cansancio? Y si no es así, ¿entonces cómo se puede justificar la existencia de Papas y Reyes?
Yo entendería que alguien fuese Rey si tuviese la fuerza de diez hombres (algo así pasó alguna vez en la historia-obviamente menos exagerado-) o entendería la existencia del Papa si tuviese poder para curar enfermedades, o volar, o al menos transformar a los enemigos en amigos como en el Age of Empires. Pero si no pueden hacer nada de esto entonces, ¿por qué están donde están?
Y es que ni siquiera se esfuerzan por parecerlo. Obviamente no hay gente "especial", el Rey es un humano y el Papa también. Pero que lo intenten disimular, que no nos vendan que son "Campechanos" ahí, con recochineo. No hombre, no.
La Iglesia debería de dar un poco de espectáculo, el Papa debería de ir volando de un lado para otro con un Jetpack por el Vaticano, y debería de organizarse una Justa anual que enfrentase a todos los Reyes del mundo (y a los príncipes y princesas, ya se entiende). Que se ganen el jornal por lo menos entreteniéndonos.
Y no, no me sirve ni la vela ni la equitación (en un sitio lo hace todo el barco y en el otro el caballo, bendita ignorancia que me permite decir esto), aquí enfrentamientos de hombres. Torneos con espadas y lanzas. A la antigua usanza. 
Pero no, se empeñan en recordarnos que son humanos, que se equivocan y se cansan. Pues señores, si son tan humanos, tengo por aquí un pico y una pala, también muy humanos. ¡Ya hombre!
¡Dales duro JuanCar! Fuente: Espanaeterna.blogspot.com.es